SEMANA SANTA
1) En
cada familia existen distintos significados y formas de celebrar Semana Santa.
Algunas participan de la creencia que
Jesús es hijo de Dios, murió y resucitó, otras no. En
definitiva, reconocemos que Jesús fue un personaje histórico que merece nuestro
respeto, aún sin compartir esta creencia.
2) Sabemos
que nuestros niños y niñas están expuestos a una gran cantidad de información e
ideas consumistas en Semana Santa, relacionadas con los “huevitos de
chocolate”.
3) Para
darle un sentido a estos hechos: muerte de Jesús / huevitos de chocolate, les
narramos la siguiente historia:
Semana
santa: Hace muchos años vivió un hombre muy bueno,
llamado Jesús. Jesús ayudaba a las personas que tenían problemas, estaban
enfermas o tristes. Algunos no querían a Jesús y lo llevaron preso. Lo pusieron
en una cruz hasta morir. Los soldados llevaron su cuerpo a una cueva y se
quedaron ahí, vigilando, para que nadie lo sacara. Al dormirse los soldados,
apareció un ángel que tocó a Jesús, lo despertó y lo sacó de la cueva.
Jesús fue donde sus amigos. Todos
estaban muy felices por su regreso. El conejito, que era la mascota regalona de
Jesús, saltaba de alegría al verlo nuevamente.
Jesús le dijo al conejito: “amigo, yo
he vuelto a vivir y ahora me voy a reunir con mi padre, Dios. Quiero que cada
vez que me recuerden en Semana Santa, saltes de alegría y recorras todos los
hogares del mundo repartiendo huevitos de chocolate a los niños y niñas que me
quieren”.
El conejito se puso muy contento con
la misión que le había dado Jesús y nos visita cada año en Pascua de
Resurrección con sus tradicionales huevitos de chocolate.
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Todos los niños y niñas del jardín prepararán una canastita para llevar este jueves a sus hogares. La idea es que cada familia maneje la situación el domingo de resurrección, de acuerdo a sus propias creencias y resuelva la cantidad de huevitos de chocolate que es prudente que consuma su hijo/ hija. En el jardín no les daremos huevitos.
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Deseamos que cada uno
de ustedes comparta Semana Santa
en armonía y en la
calidez de sus familias,
cariñosamente, Las tías.